Este es el producto sancionado por la SIC.
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Youtube/ Kokorico

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SIC sanciona con $277 millones a Kokoriko por publicidad engañosa en ‘Picada mundialista’

La Superintendencia evidenció que es falsa la información sobre la cantidad del producto ofrecido.

Una suma de más de 277 millones de pesos deberá pagar Avesco y Kokomonroper, propietarias de restaurantes Kokoriko, por publicidad engañosa en la ‘Picada mundialista’, uno de los productos estrellas del restaurante en esta temporada.

De acuerdo con un comunicado divulgado por la la Superintendencia de Industria y Comercio, en la publicidad que ofrecían al público aseguraran que la cantidad del producto incluía ocho alas de pollo y cuatro mazorcas, pero lo cierto es que al consumidor se le entregaban realmente cuatro alas, divididas cada una en dos piezas (sin especificarlo), así como media  mazorca dividida en cuatro partes.

La Delegatura para la Protección del Consumidor de la Superintendencia de Industria y Comercio confirmó, en segunda instancia, las multas impuestas por publicidad engañosa e información no veraz e insuficiente en la promoción del producto.

“La Delegatura para la Protección del Consumidor de la Superintendencia de Industria y Comercio confirmó, en segunda instancia, las multas impuestas por publicidad engañosa e información no veraz e insuficiente en la promoción conocida como “La Picada Mundialista”, a las empresas AVESCO S.A.S. y KOKOMONROPER OPERADORA DE FRANQUICIA KOKORIKO S.A.S., propietarias de los restaurantes KOKORIKO, por un valor global de DOSCIENTOS SETENTA Y SIETE MILLONES SETENTA MIL QUINIENTOS PESOS ($277.070.500.oo)”, dice el comunicado de prensa.

Según detalló la SIC, realizaron visitas al establecimiento y también en la página web del restaurante para recaudar pruebas y proceder a la sanción.

Así las cosas, la Superintendencia determinó que la información sobre la cantidad del producto ofrecido en la promoción conocida como ‘La picada mundialista’, vendida por 39 mil 900 pesos,  no era veraz ni verificable y que, siendo así, la publicidad a través de la cual se promocionó el producto resultaba engañosa, toda vez que su mensaje no corresponde a la realidad e induce a los consumidores en engaño y confusión, al defraudar sus expectativas con relación a la cantidad de alas de pollo y de mazorca ofrecidas, lo cual vulnera los artículos 23, 29 y 30 de la Ley 1480 de 2011. 

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